TELETONGO 2011: Empresas condicionaron donaciones a flujo de ventas (¡Qué solidaaaarios!)

En la Teletón 2011, las empresas que antes lavaban su imagen con suculentas donaciones, ya ni de eso fueron capaces, sino que condicionaron su aporte, a la cantidad de personas que compren, que consuman la «pomada».

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Arrancando la Teletón 2011 ya vimos como dos empresas hicieron uso de los canales de TV chilena en cadena, para llamar a que el Sábado concurran a comprar a sus locales repartidos por el país, con la excusa de la ayuda a la obra que te remueve hasta los huesos con dramáticas historias.

La meta para la donación de Unimarc fue que se realicen 500.000 compras. Por su parte la empresa Ripley, usando la misma estrategia de la donación condicionada, señaló que esperan llegar a la meta de 70.000 compras para, recién ahí, hacer su aporte. Finalmente su «solidaridad» publicitada, se tradujo, como siempre, en un porcentaje del dinero desembolsado por los miles de chilenos que frecuentaron esos establecimientos.

El animador y fundador de la Teletón, Mario Kreutzberger, más conocido como Don Francisco, sonrió y gritó sobre el escenario, llamando a ir al Banco de Chile (que obliga a sus trabajadores a realizar un voluntariado forzoso para estas fechas), aprovechando la sensibilidad que generan las historia de niños y niñas afectados por la discapacidad.

Lo que queda claro es que esto, en ningún caso se trata de solidaridad, que cuando lo es tal, es anónima y permanente, y no sólo en 27 horas de show para que las empresas que lucran con los ciudadanos día a día, laven su imagen.

Fuente:
http://www.elciudadano.cl/2011/12/02/44972/teleton-2011-empresas-condicionan-donaciones-a-flujo-de-ventas/

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TELETONTALITARISMO: No se pueden desplegar lienzos que no sean de la Teletón, ni se puede interrumpir el Sermón sobre la «Unidad» que produce la Teletón. Es que la Teletón es una Religión, y no se puede interrumpir la Eucaristía, ni se pueden tocar las Vacas Sagradas, como el «Mesías» Don Francisco, ni se puede hablar de los Mercaderes del Templo Teletonero; porque entonces, los Fariseos rasgan vestiduras frente a los Medios de Manipulación de Masas.



NOTA DE XENTOR: Sorry a los varios opinólogos al pedo que no han visto publicadas las estupideces que han comentado por estos días en mi post del año pasado «TELETÓN: Lucrando con tu Compasión». No es que yo no quiera «debatir» sus «ideas», ni enfrentar sus críticas, ni pueda contestar sus «argumentos». La culpa no es mía, sino de Blogger, que tiene la muy mala costumbre de impedirme, de vez en cuando, responder en mis propios Blogs. Así lo hizo durante varios meses a lo largo de este año, y ahora lo está haciendo de nuevo.

Ante eso, cuando me hacen preguntas o críticas a las que no puedo responder, porque Blogger me lo impide, sólo me quedan las siguientes opciones:

1) Publico ciertas críticas estúpidas que me han hecho, y las dejo sin contestar, dejando así la impresión de "a falta de respuesta, será porque tienen la razón".

2) Dejo sus comentarios en lista de espera por quien sabe cuántos meses, hasta que Blogger me deje contestar de nuevo.

3) Elimino sus estúpidos comentarios, no por "falta de argumentos" a las estupideces que esgrimen (de verdad que era para hacerme un festín con las burradas que algunos me escribían), sino porque, simplemente, no valen la pena ni para tratar, siquiera, de hacer un esfuerzo especial para ver por qué diablos Blogger no me deja contestar, y cómo podría solucionar eso.

4) Deshabilitar toda la plataforma de comentarios, para que así desparezcan todos, y el blog vuelva a ser como era al principio: sólo artículos, sin comentarios. Ayer busqué en mi Escritorio de Blogger si estaba esa opción, y me encontré con que no se podía. Al parecer, una vez que habilitas la opción de comentarios, sólo se pueden deshabilitar los comentarios futuros, pero no borrar de un plumazo todos los comentarios pasados, como había pensado. Sólo se pueden eliminar los comentarios uno por uno, y no me voy a poner a hacer tal cosa.

Así que, lo siento, queridos enemigos: sorry por no publicar las estupideces que con tanto cariño y dedicación me han dedicado. Mejor den gracias de que Blogger no me haya dejado contestarles a cada uno como bien se lo merecían por imbéciles, porque de verdad que me hubiera hecho un festín.

Por esta misma razón, les sugiero que no se molesten en seguir escribiéndome idioteces, porque mientras Blogger no me deje contestarles, no se las voy a publicar. En cambio, sí publicaré los comentarios que no requieran una respuesta de mi parte.